miércoles, 13 de abril de 2011

Who thought melancholic music could be this effing awesome?

Acabo de descubrir esta pagina (8tracks) donde puedes subir playlists de no mas de 8 canciones y compartirlas y cuantamadres posibilidades sociales existen hoy en dia. Se las recomiendo. Les dejo mi primer experimento.






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viernes, 8 de abril de 2011

El dia que conoci a Shakira (con soundtrack y todo)

Para que medio funcione la jalada del soundtrack, solo pongan como los primero 30-40 segundos de la rola. 

Ese día me levante temprano sin querer ya que sin problema alguno el sol robo la virginidad de mi ventana gracias al himen de poliéster que tengo por cortina. Me sentía mareado y asqueado. Mi cerebro se sentía como si estuviera hecho de gelatina y se hubiera expandió unos milímetros durante la noche y estuviera ejerciendo presión sobre toda la superficie interna de mi cráneo. No es el tipo de dolor que se puede localizar en un lugar en especifico, ni tampoco a fraguado al punto que se le puede denominar como dolor. En otras palabras, seguía pedisimo.

himen

Fui al baño e hice pipi fosforescente. Me di un baño de credo (crudo y pedo) lo cual involucra tomar varios litros de agua directo del lavamanos y el liquido sobrante esparcirlo sobre mi rostro. Me quite los zapatos y el pantalón y me puse algo más cómodo: mis Vans. Baje las escaleras en camisa de vestir trusa y Vans, cual victima de secuestro exprés. Fui directo al refrigerador y dando gracias al Señor, tome lo que quedaba de la barra queso, le puse mostaza Dijon y me la empecé a comer como si fuera una manzana con chamoy. Abrí una de las sobrevivientes Tecates light que tierna y fielmente se escondieron en el fondo de la repisa para brindarme su refrescante cariño el día de hoy.

El Chanel No.5 de la comida

Tambaleándome con pasos cortos y descoordinados llegue hasta el sillón de la salita de la entrada. El sol entraba por la ventana frente al sillón. Me senté mientras comía mi queso y daba cortos tragos a mi cerveza. El tibio sol toco mi rostro y mis brazos y el resplandor me hizo cerrar los ojos. Me dolió un poco el sentirme encandilado pero al mismo tiempo lo disfrute. Me quede inmóvil con los ojos cerrados por unos minutos.


De pronto mi tranquilidad fue interrumpida por una imagen: mis zapatos. ¿Por qué pitas traía zapatos cuando me levante si yo nunca pinches uso zapatos? Es mas no tengo zapatos. Solo tengo un par marca Hush Puppies tan pero tan jodidos, que bajo la iluminación correcta, de neta parecen Hush Puppies. Los que me quite en la mañana eran unos zapatos de esos de cuero rígido, como los que usan los adultos que tienen el nombre de algún señor italiano impreso en la plantilla. Baje la mirada y me di cuenta que la camisa que traía puesta no era mía, o si era mía era la primer vez que le veía. Era una camisa para smoking.

Denle croquetas a esas criaturas

De una bestial mordida me termine mi queso a al Dijon y me lo pase con un largo trago de cerveza. Apreté la lata vacía, faje mi camisa bajo la trusa, salí de la casa y lance la lata a la casa del vecino que todos los pinches sábados de carne asada en mi casa le habla a la policía. Regrese a mi sala y todo fajadito me puse a pensar, o más bien a tratar de recordar... nada. Blanco...wuaka-nada. Sacudí mi cabeza y en eso escuché un ruido venir del cuarto de huéspedes en el segundo piso.


Cauteloso me dirigí a las escaleras.

Subí el primer escalón... tratando de recordar.

Escalón a escalón intrigado, cauteloso y honestamente temeroso llegue hasta la puerta. Con tremendo cuidado la abrí y ahí estaba Shakira dormida en un colchón inflable desinflado. De almohada una toalla de baño echa rollito y de colcha sus colombianos brazos. Seguía dormida. Cerré la puerta di media vuelta y me recargue sobre la pared tratando de entender que estaba pasando. Poco a poco y sin darme cuenta termine sentado y posteriormente dormido.

Aaaaaghh que sueño

Abrí los ojos insanamente fresco y Shakira estaba parada frente a mí. "Hola Shakira, buenos días, pies descalzos es uno de mis discos favoritos de todo el mundo hay queso en refri" le dije casual. Con una sonrisa honesta me contesto "Ya me voy, gracias por dejarme quedar en el piso de tu casa". "No es nada" le dije mientras me ponía de pie lentamente rebasando la diminuta figura. En la tele se ve mas grande. “En la te ves más grande y porque estas aquí y no en... Beverly Hills o algo así" estaba nervioso la verdad. "No te acuerdas en serio" me dijo ella con los ojos uber abiertos. No tenía idea de lo que estaba hablando y la verdad me estaba poniendo más nervioso y por lo tanto mas errático. "Soy casado Shakira deja de verme así" le dije cuando en realidad ella estaba dándome la espala caminando en dirección a las escaleras.

La seguí a distancia todavía tratando de entender que chingados. “! Shakira espera!" grite. "Por favor tienes que contarme que paso". Shakira se detuvo, dio media vuelta y comenzó:

"No puedo creer que en serio no te acuerdes de nada. Acordamos hacer una entrevista previa a mi concierto aquí en Monterrey con La Cucharada de Jocoque ya que es la cosa mas sexy que he visto después de Carlos Ponce en Speedos. Tu, llegaste tarde y borrachísimo. Te hice un comentario sobre tus Vans y de la nada te enojaste muchísimo, me empezaste a decir Su Alteza y te fuiste en taxi a rentar un smoking. Regresaste en smoking y con una botella de Jagger en la mano a la mitad. Cuando obviamente no te querían dejar entrar los de seguridad a la zona VIP casi te peleas con uno de ellos, una mujer de 60 años para ser mas especifica y tuve que ir personalmente a detenerte y evitar que te golpearan probablemente a la muerte ahí mismo. Después de que te ayude me abrazaste y me dijiste que estabas casado y que nunca harías nada para violar ese "sagrado día de peda" como le decías tú. Como todo mi staff te quería matar, literalmente te querían matar, ya hasta tenían una bolsa de basura jumbo para ti, personalmente te tuve que traer a hasta tu casa. Me tuve que quedar porque empezaste a llorar y a vomitar y ya no me pude ir. No hubo concierto gracias a ti"

Shakira se me quedo viendo esperando que dijera algo. Procesando todo esta información, fajado en mis trusas y con Vans le dije: "Deja te pido un eco"


El ecotaxi llego y ella se fue. El Nissan Tsuru de color verde rápidamente se fue de mi vista. Regrese la mirada al atardecer y a lo lejos pude ver al Cerro de la Silla reflejando los imponentes brazos del sol. Vi a la ciudad, respire hondo y en delicadas y tersas palabras dije "de nada".